Le compró un dilatador anal a su novia para ver si así la animaba a tener sexo anal, pero cuando ella vio el regalo, se enfadó de tal manera que se fue de casa. En ese momento apareció su compañera de piso, y ella sí que aceptó el regalo, por lo que se fueron al dormitorio a follar juntos y a disfrutar del sexo anal. El problema es que mientras estaban dándole al lío, volvió su novia arrepentida y los pilló follando, dando por finiquitada la relación que tenían desde hace años.